PREGUNTA: Ustedes comienzan a mediados de 1996 como una modesta empresa y entran este año como una modesta empresa y entran este año como una de las empresas líderes en el sector de la telefonía móvil. ¿Cómo han conseguido esta evolución tan sorprendente?
RESPUESTA: Nosotros empezamos coincidiendo con la liberación del sector del mercado de las telecomunicaciones y sobre todo con el nacimiento y crecimiento de la telefonía móvil. Pero aparte de la propia evolución de este sector que ha cambiado mucho también hay que destacar que el Grupo Meflur Comunicaciones cada año se ha metido en un reto nuevo y eso posiblemente ha hecho que la empresa crezca más que el resto de la competencia. Cada año se ha planteado como un proyecto y un reto nuevo, y gracias a Dios se han ido cumpliendo los objetivos de esos proyectos anuales. En un principio, empezamos como distribuidores. En 1997 fuimos un grupo de distribución, en 1998 fuimos mayoristas, en el 1999 ya estábamos en la etapa superior como representantes de los fabricantes, empezamos con la red de tiendas Phone Land, que actualmente es la primera cadena de tiendas propias de la red MoviStar.
P- Ante esa trayectoria, ¿Qué reto se marcan para el presente y próximo año?
R- Hemos empezado otro reto internacional y un proyecto completamente virtual como las máquinas de recarga, la Movilcarga. Actualmente, sólo estamos dos licencias en España. Esa es nuestra evolución: Cada año emprender nuevos retos.
P- Ya consolidados en España, ahora se lanzan a la aventura Internacional.
R- Y tenemos tiendas distribuidas por toda España, estamos en todas las direcciones territoriales de Telefónica. También tenemos presencia en el mercado Internacional con oficinas en Argentina, brasil y Marruecos. Este año tenemos el proyecto de Alemania, gracias a la nueva licencia que consiguió Telefónica para explotar un nuevo servicio de telefonía. Telefónica ha iniciado este nuevo proyecto y nos ha pedido ir de la mano en el mercado alemán, así que ese es el plan en el que estamos trabajando ahora.
P- A pesar de que llegan a un país como Alemania con un reto difícil, debe dar algo de seguridad o prestigiosa el saber que se embarcan en esta empresa de la mano de toda una multinacional como Telefónica.
R- Sí, de alguna manera trabajar con Telefónica se ha convertido en casi todo un sello de calidad. En España y en el sector ya nos conocen como “los de Monzón” y sé que se habla de nosotros con cierta admiración y respeto. En términos absolutos somos la empresa que más ha crecido en este sector.
P- Algo que también le han reconocido con la entrega del premio celular al mejor Distribuidor. ¿Qué significa este galardón para Grupo Meflur Comunicaciones?
R- Lógicamente, supone el reconocimiento a una empresa que ha empezado de cero que dentro del sector de los mayoristas de Telefónica somos la única que no tiene ningún grupo financiero detrás. Hacerse hueco y competir con todas las grandes empresas que son multinacionales o grupos financieros no resulta fácil. Cuando nosotros empezamos como mayoristas todos estaban ya situados y cada uno tenía su parcela de mercado. En estas circunstancias es más difícil crecer porque tienes que ir añadiendo y demostrando que algo sabes hacer mejor que el resto.
“Los de Monzón”
P- ¿Su evolución y su currículum empresarial significan que desde el Alto Aragón y desde ciudades como Monzón también se puede llevar a la práctica proyectos líderes en su campo y con proyección internacional?
R- Tengo que reconocer que los primeros años fueron mucho más duros porque estábamos negociando con grandes empresas y con multinacionales tanto en Madrid como en Barcelona. Entonces, cuando decías que llamabas a los de Monzón, desde un pueblo de Huesca, pues siempre causaba un poco de escepticismo y estupor. Pero cuando demuestras que lo haces bien o mejor que los demás y vas destacando en otro tipo de cosas, pues eso genera admiración. Ahora ya todos nos conocen como “Los de Monzón” y saben el potencial que tenemos detrás. Pero si algo tiene los tiempos de la nueva economía global es que desde cualquier pueblo puedes hacer cosas interesantes. Ahí tenemos el ejemplo de Barrabés. Ahora ya no hay límites geográficos. De todas formas, estoy convencido de que tenemos muchas más posibilidades los que estamos en áreas como Monzón, que las empresas asentadas en grandes capitales. Tengo que reconocer que en Barcelona, Madrid o Sevilla, o Galicia nos cuesta mucho más hacer los equipos. Aquí en Monzón no te faltan recursos humanos, por ejemplo. Todo el mundo está muy bien preparado y la gente siente más la empresa como suya y es más fácil hacer equipos de una forma más uniforme.
bernabenoya.es
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